Ingredientes
Equipamiento
Elaboración
- Deja los garbanzos en remojo la noche anterior en abundante agua con sal.
- Al día siguiente, corta los puerros y las zanahorias en rodajas finas.
- Cuece los garbanzos hasta que estén tiernos, escúrrelos y saltea con manteca de cerdo.
- Pasa los garbanzos por un chino o tritúralos para obtener una crema suave.
- Mientras tanto, hierve los huevos durante 10 minutos, enfría, pela y corta en trozos pequeños.
- Pica las cebollas muy finas y sofríelas en aceite de oliva hasta que estén transparentes.
- Añade los tomates picados al sofrito y deja cocinar unos minutos.
- En otra olla, calienta el caldo de pollo junto con las zanahorias, los puerros y el laurel.
- Cuando el caldo hierva, añade el puré de garbanzos y el sofrito.
- Tritura la mezcla si deseas una textura más fina o deja los trozos para una versión rústica.
- Rectifica de sal y añade cominos molidos al gusto.
- Justo antes de servir, incorpora el huevo duro picado y los cuscurros de pan frito.
- Espolvorea con perejil y sirve bien caliente.
Nutrición
Vídeo
Notas
La Sopa de Garbanzos Granadina es una receta sencilla pero llena de historia. Su sabor, su textura y su aroma evocan la cocina de nuestras abuelas, esa que reconforta cuerpo y alma.
